22 de agosto de 2008

Me encanta oler las sábanas y el sofá cuando huelen a él. Adoro mirarle a los ojos. Amo besarle mientras duerme, y despertarlo. No hay cosa que más me guste que hacerle vestirse y meterse media hora de coche hasta mi casa de madrugada.

¿Por qué pese a todo tengo miedo de enamorarme? No quiero enamorarme, es mejor decir adiós... (o hasta mañana)

0 comentarios: